Súbete en la atracción que más temes, aquella que miras desde abajo, oyes a la gente gritar y te sientes incapaz de subir. Súbete en aquella que mayor velocidad alcanza, la que más alto llega, la que más vértigo te da; súbete y grita. Grita SU nombre con todas tus fuerzas.Grita lo mucho que le quieres. Allí nadie te escucha. Y sin darte cuenta, el miedo se esfuma. Aquella atracción que tanto temías...hasta te ha gustado y decides volver a subir. Créeme, lo he probado y funciona ;)
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